La tensión creativa, motor de la innovación

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La tensión creativa, motor de la innovación

LA TENSIÓN CREATIVA, MOTOR DE LA INNOVACIÓN

 

 

Oscar Javier Jiménez Yepes 

MBA Universidad Javeriana 

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Mail: oscar.jimenez@greatplacetowork.com 

 

 

Leyendo esta semana el libro “La quinta disciplina” de Peter Senge, me dejo una profunda reflexión como empresario o emprendedor como prefieran llamarlo.

 

Primero se refiere a la tensión creativa que él define como la brecha entre la visión de una organización y la realidad que la organización vive en el presente.

 

Por ejemplo una empresa que sueñe con ser la comunidad de abogados más grande del país, expandirse internacionalmente, transformar el negocio de servicios legales y como consecuencia de esto superar el millón de dólares en ingresos netos.

 

La realidad actual de esa organización es que tiene un puñado de abogados, poco comprometidos con la visión, que no ha logrado digitalizarse, ni consolidar el negocio ni siquiera en Colombia y que los ingresos se limitan a lo sumo a un par de casos al mes.

 

La brecha es clara y la solución puede verse de dos maneras:

 

La primera es actuar, implementar con juicio y trabajo duro planes de acción para cerrar la brecha y a través de crear a diario novedosas maneras de hacer las cosas, van cerrando la brecha hasta lograr la visión y a partir de ahí proponerse más audaces retos, que les ayuden a entender que todo es posible y que el límite es más allá del cielo. El autor llama a este proceso la tensión creativa, la visión que en principio parecía ciencia ficción  se mantiene y la tensión más allá de desmotivar se convierte en un motor que promueve la innovación y la creatividad en cada uno de los miembros del equipo, se la creen y la hacen realidad.

 

La segunda, es dejarse ganar por la frustración y desesperanza que produce una visión audaz y retadora, y en esta forma se crea una segunda tensión que el autor llama la tensión emocional.

 

La tensión emocional termina sugiriendo una solución facilista que impacta negativamente la visión, en ese momento, para aliviar la frustración se opta por una visión menos retadora, más fácil, que requiera mucho menos esfuerzo.

 

En esta segunda opción se obtiene un alivio pasajero de la tensión emocional que lleva irremediablemente a una segunda, tercera, cuarta reducción de la visión, que terminará construyendo un círculo vicioso que al final mata el sueño, asesina una idea maravillosa, que entierra las ilusiones de un grupo de emprendedores que se negaron la posibilidad de llevar a feliz término un gran aporte, un gran negocio, la transformación de un mercado, la generación de una gran prosperidad para todos los grupos de interés.

 

De que lado estamos?

Cuál es la solución que proponemos?

Tensión creativa?

Tensión emocional?

 

Mi respuesta definitivamente es Tensión Creativa, estoy decidido a cambiar al mundo y con un gran equipo estoy seguro de poder hacerlo.

 

 


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